Diagnóstico y Proceso participativo
Vivimos en un mundo diverso, globalizado e interconectado. Nuevas identidades, pertenencias y relaciones se crean y se destruyen día a día en nuestros pueblos. Para comprender las dinámicas de la convivencia, sus avances y retrocesos y sus potencialidades y sus retos en la Comarca del Bajo Aragón-Caspe // Baix Aragó-Casp y para promover la convivencia intercultural nació el Plan de Convivencia en la diversidad cultural
A la histórica diversidad de la población de nuestros pueblos conformada por personas de muchos pueblos y lugares de la geografía aragonesa y española, se une la presencia reciente de personas que llegadas desde diversos lugares del mundo han decidido instalarse aquí como vecinos y vecinas. Para favorecer la identidad, la pertenencia y la relación mutua debe promoverse procesos de convivencia intercultural en la que todas las personas sean protagonistas de la creación de una sociedad progresivamente más cohesionada.
Como punto de partida de dicho plan, se realizó un diagnóstico participativo previo en el que se implicaron los técnicos y agentes sociales, vecinos y vecinas, e instituciones públicas de la Comarca.
Los objetivos que se plantean son:
- Valorar el estado de la convivencia en la diversidad cultural en la comarca.
- Conocer las actitudes y percepciones que existen en la población en torno a la convivencia.
- Identificar puntos conflictivos latentes o manifiestos.
PROCESO PARTICIPATIVO
Dentro de las líneas estratégicas del Gobierno de Aragón se apuesta en trabajar desde el principio de ciudadanía y convivencia. La comarca como punto de partida realizó un estudio diagnóstico que fue presentado el 3 de octubre de 2018 en Caspe sobre la realidad en la convivencia en dicha diversidad, datos claves y conclusiones.
Este dato la sitúa como la comarca con mayor presencia de residentes extranjeros en Aragón.
Con respecto a la procedencia:
En este contexto, la convivencia intercultural se analizó bajo los conceptos de hostilidad, coexistencia y convivencia, siendo el resultado desigual dependiendo del municipio y el perfil de inmigración. Como conclusiones en forma de gráfica presentamos el actual cuadro:
Estas conclusiones avalan la necesidad de poner en marcha de un plan de convivencia con varios principios y retos, igualdad, corresponsabilidad, inclusión y gobernanza participativa. Se diseñó inicialmente un plan con cinco ejes o líneas estratégicas dirigido a acoger y atender la diversidad cultural, fomentar el encuentro y conocimiento mutuo, impulsar la convivencia a través de la mediación intercultural, promover la corresponsabilidad y ciudadanía activa y favorecer la igualdad de oportunidades.
En este marco, en un segundo momento, la Comarca Bajo Aragón Caspe – Baix Aragó/Casp y la Dirección General de Participación Ciudadana, Transparencia, Cooperación y Voluntariado (Aragón Participa) del Gobierno de Aragón, impulsó un proceso de participación ciudadana para la elaboración del PLAN DE CONVIVENCIA EN LA DIVERSIDAD CULTURAL en la citada comarca.
Con este proceso se pretendió generar un espacio de debate y reflexión donde los usuarios y las entidades implicadas pudieron realizar aportaciones y enriquecer con sus propuestas el citado plan.
Una vez finalizado el proceso de participación, se realizó una fase de retorno a la ciudadanía, dejando paso a la aprobación política del Plan.